A ese pobre muchacho jamás le sucedió dicho acontecimiento, como seguro le paso a varios, pero en cambio cuando se hacían la medianoche otro ser salido de las más allá se asomaba desde abajo de su cama y con una sonrisa de aspecto maligno, robaba aquel diente para luego refugiarse entre las sombras.
Muchos aseguraban ver a este ser y sobre todo que uno si aguantaba no dormirse podía escuchar su voz, un susurro aterrador, que helaba la sangre de hasta el hombre mas valiente.
También aseguraban que aquel susurro era seguído por un ruido similar a mil dientes que depositaba dentro de una cajera blanca, construida con los huesos de niños que se habían quedado por curiosidad a esperar su llegada.
Cierto día a este muchacho se le presentó este ser, eran ya la medianoche un poco pasadas, cuando desde abajo de su cama la risa de escucho y lo dejo paralizado, rápido intento disimular su miedo pero luego le siguieron a aquella risa el susurro y el ruido de los dientes.
Después de unos segundos hubo un silencio total, cuando el muchacho quiso ver que pasaba un rosto de un ser demoníaco se presentó ante el que rápidamente comenzó con dus labores, como era de costumbre.
El chico no gritaba pero sentía el dolor que este le producía al irle arándano los dientes poco a poco. Finalmente el joven murió desangrando y sin que nadie supiera. A la mañana cuando los padres fueron a depestarlo, su hijo ya no estaba y solo había en la cama un diente blanco y brillante, mientras que desde abajo de la cama una figura sonreía contenta...
Hola! Espero que les haya gustado esta historia y si, se que no es algo como que muy bien relatada pero me parecio genial el concepto.
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