Porque el arte siempre te ayuda a reutilizar aquellas cosas que alguna vez parecían inutilizables, y sobre todo a darle tu toque, y de allí fue como salió la idea de aprovechar ésta vieja tabla de skate, y que ya poseía dicho sea de paso, un boceto realizado por mi hermano, boceto que también modifiqué dándole ese toque de catrina, pero seria una terrible y fatal ofensa si yo no nombrara a mi hermano como partícipe también de este trabajo.
Me llevó al rededor de cuatro días terminarlo, y creo que trate de fotografiar todo el proceso, para que se fuera notando el cambio, por así decirlo. Está pintado completamente en acrílico, y falta el acabado final que es la capa de barniz, la cual le dará el toque necesario para que el dibujo se luzca, y sobre todas las cosas obtenga toda la fuerza, y brillo que este material ofrece, también agregar que el barniz impedirá cualquier cosa que pueda dañar a la obra.
Si bien esto no pienso hacerlo un skate, va a quedar allí como cuadro decorativo quizás, o de adorno para algún fanático de las patinetas. Pero sin dudas me encuentro realmente conforme con el trabajo realizado, y sin mas preámbulos aquí les dejo las imágenes.